Dr Otto Alvarado @DrOttoTv: Otitis Canina

LO MÁS IMPORTANTE DE LA OTITIS CANINA

Primero que nada definiremos el término, y no es más la inflamación del oído, sea cual fuere su causa, es ahí donde entra en juego la experiencia y capacidad del Médico Veterinario para ponerle "apellido" al problema, es fundamental que no se queden con solo el nombre del problema, pues éste ya usted lo sabe: "Otitis", llévelo al Médico Veterinario de confianza y pídale el "apellido", es decir Otitis de que tipo, Bacteriana?, Parasitaria?, Alérgica?, Traumática?, Química?, etc., pues, dependerá de esto el tratamiento correcto, y de más está decir que son tratamientos diferentes.

Ahora identifiquemos el problema, éste generalmente se detecta cuando ya los signos son muy evidentes, estos son: inclinación de la cabeza hacia el lado afectado, sacuden la cabeza constantemente, mal olor, enrojecimiento, dolor, y en casos más avanzados puede presenciarse insectos merodeando la cabeza del animal y pérdida del apetito.

Nosotros como Médicos Veterinarios, debemos estar en la capacidad de solucionar el problema sin causar mas molestias, lo que podemos lograr al tranquilizar al paciente para realizar una limpieza profunda del oído y sus alrededores, generalmente afeitamos la zona muy bien y ejecutamos lavados profundos con sustancias antisépticas, todo esto algunas veces inclusive bajo anestesia si fuese necesario para poder identificar la magnitud del problema, pues, puede estar afectando varios niveles, en oído externo o pabellón auricular solamente, en oído medio, en el oído interno, y mixtas, que suelen ser las más graves.

Una vez identificado en problema y la magnitud del mismo, se procede a utilizar las herramientas diagnósticas a las que fuesen necesarias para colocar el "apellido" al problema, por lo que invito a nuestros lectores que utilicen los servicios de un Centro Veterinario que cuente con laboratorio y herramientas básicas como el ORL o lámpara para la

evaluación profunda del oído

ya que inmediatamente se puede ver dentro del oído y analizar la muestra de lo obtenido del mismo, así se podrán detectar ácaros en casos de otitis por sarna (parásitos)

se podrá a su vez tomar muestra de la secreción con un hisopo estéril especial para realizar cultivos de las bacterias que estén afectando al oído, y realizar un antibiograma, NECESARIO especialmente en otitis crónicas o recidivantes con secreciones, ya que es éste el que nos dirá con seguridad cual antibiótico va a funcionar en caso de bacterias sensibles, y cual no podemos usar por que las bacterias aisladas son resistentes.

Luego de obtener los resultados, se procede entonces a indicar el tratamiento, NO AUTOMEDIQUE A SU MASCOTA, es importante que su veterinario sea el que indique el tratamiento después de todos los pasos anteriores, ya que se suele caer en el error de "utilizar el ultimo medicamento que le mandaron la vez que tenia algo parecido", puede que sea una otitis, pero no con el mismo apellido.

Es fundamental manejar que todos los tratamientos para las otitis debe ir acompañados de una buena limpieza diaria, dicho de otra manera el mejor antibiótico no dará su mejor resultado si no se realiza una limpieza correcta del oído antes de colocarlo, la mayoría de la otitis ceden en 7 o 10 días, por lo que generalmente yo indico el tratamiento una vez al día por 7 o 10 días continuos, si la otitis no mejora o no se desaparece por completo, debe revaluarse el tratamiento hasta que desaparezca el problema por completo, no debemos acostumbrarnos al problema, y es frecuente escuchar en la consulta comentarios como: "el siempre a tenido ese problema", "el toda la vida a sufrido de los oídos".

Finalmente, si su mascota es de las que no se dejan manipular los oídos con facilidad, deberá pedirle apoyo a su médico, y evaluar la posibilidad de dejarlo en custodia durante el tratamiento o de llevarlo todos los días para que sea el Médico quien realice la limpieza, con la finalidad de no perder el tiempo, o no darle posibilidad al a infección de que empeore, pues, las consecuencias serán mayores para nuestro amigo, que solo ladra y nos mirará pidiendo ayuda. Así pues, "pare la oreja".